Tuve una estancia maravillosa en Amber Light Villas. La habitación con jacuzzi privado era espectacular. La atención del personal, especialmente Constantine, fue excepcional. Sin embargo, la conexión de internet dejó mucho que desear. Sin duda, un lugar donde el relax y la amabilidad sobresalen.

la piscina privada estaa brutal, el desayuno es un festín y el personal super atento, hicieron nuestra estancia muy cómoda. la vista al mar desde la habitación es espectacular y la zona chill de la piscina es perfecta para relajarse.

el wifi no era muy bueno y el camino hacia el centro es un poco largo.

El ambiente es muy tranquilo y la vista es espectacular.

Durante nuestra estancia, la conexión de internet fue terrible. casi no podíamos usarla, lo cual es inaceptable para el precio que pagamos. Además, el restaurante tiene una carta muy limitada y los precios son excesivos para lo que ofrecen, definitivamente no vale la pena. La ubicación, aunque es hermosa, está tan alejada que sin un vehículo no puedes hacer nada, lo cual se convierte en una gran desventaja.

La piscina privada y el jacuzzi eran geniales, pero el wifi no funcionaba bien.

Desayuno excelente y vistas espectaculares.

La habitación era increíble, con mucha luz y

amplios espacios. Disfrutamos muchísimo del jacuzzi privado y de la piscina. El desayuno fue delicioso aunque un poco repetitivo. El personal fue muy amable y siempre dispuesto a ayudar, lo que hizo que nuestra estancia fuera aún más agradable.

La piscina de Amber Light es tan grande que podría albergar un torneo de natación, y las vistas al mar son tan emocionantes que hacen que nadar se sienta como un viaje directo al cielo. El spa, que parece más un palacio de relajación que cualquier cosa, ofrece tratamientos que te dejan más ligero que un barco de papel flotando en el Aegean.

La conexión a internet fue problemática.

Recomendaría el lugar sin duda alguna para relajarse durante un par de noches,

tranquilo espacio, impresionante desayuno, disfrutamos mucho de la piscina privada y el jacuzzi que tenía vistas al mar, además de contar con un área de comedor al aire libre que hacía nuestra experiencia aún más agradable.

Todo estuvo bien.

Pasamos unas vacaciones increíbles con amigos. La atención fue excelente y disfrutamos de una excursión en barco por la caldera, además de visitar Oia. El desayuno era variado y la habitación tenía una mini piscina privada, perfecta para relajarse.

Una experiencia negativa fue que el servicio de transporte al aeropuerto no fue muy flexible, ya que requería reserva previa y algunas veces los restaurantes no pudieron llamar por nosotros.

La habitación era amplia y bien decorada, me encantó el jacuzzi privado con vistas al mar. La cama era cómoda y el agua embotellada era gratis, lo que se agradece. El desayuno en el área especial tenía buenas opciones, aunque algunas cosas se acababan rápido. La limpieza fue buena, pero noté pelos en el desagüe de la ducha, lo que no me gustó tanto.